...Yo me entere estando en Mazatlan, y la verdad nunca me hubiera esperado ver, lo que vi cuando llegue a donde teniamos la pension de bartolome de las casas....
Cada 22 de abril en Guadalajara es inevitable pensar en lo que sucedió en el año de 1992. El recuerdo de observar el centro de la ciudad destruído, además de saber que tantas personas murieron por un descuido de algunas empresas y del gobierno local, hacen que año con año un sentimiento de frialdad y abandono te recorran el cuerpo.
Los recuerdos fatídicos de aquel día aún persisten. Gobierno local y los habitantes de la misma zona no quieren olvidar, pues fue una experiencia que nos marcó de por vida.
Ahora en 220 cajas se encuentran los restos, recuerdos y pruebas de lo que sucedió tras las explosiones del 22 de abril y las conserva el Archivo Histórico del Estado de Jalisco, a disposición de cualquier persona que aún tenga dudas o quiera consultar lo que quedó.
Un recuento de los daños corto y preciso sería así:
Las explosiones en el Colector Intermedio del Oriente, comenzaron a las 10:05 horas. Ya se habían destruido ocho kilómetros de calles, afectado mil 142 hogares, 450 comercios, 100 centros escolares y 600 vehículos. Durante las primeras 24 horas los servicios médicos de urgencia habían trasladado alrededor de dos mil lesionados. En su mayoría se retiraron el mismo día.
Fueron 210 personas la que murieron en las explosiones, al menos ésta es la cifra oficial, pero se estima la cuenta llegó hasta 1,000 personas.
La causa: el mal manejo de hidrocarburos por las empresas de la zona, como PEMEX y empresas industriales de las cuales nunca se conoció el nombre. Los derrames gota a gota provocaron una explosión gigantesca y a 17 años del incidente, el asunto no ha sido resuelto.
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